32 1[87] Después de estos eventos y de esta fidelidad de Hizkiyah, Sanjeriv rey de Ashur vino,
invadió a Yahudáh y asedió las ciudades fortificadas, pensando que él irrumpiría en ellas y
las capturaría. 2 Cuando Hizkiyah vio que Sanjeriv había venido y su rostro estaba afirmado en
atacar a Yerushalayim, 3 él consultó a sus ancianos y sus hombres poderosos acerca de sellar el agua en las fuentes fuera de la ciudad; y ellos lo ayudaron,
4 una multitud grande se reunió para
bloquear todas las fuentes y arroyos en el campo. Ellos razonaron: "¿Por qué vendrán los reyes de
Ashur y encontrarán suministros amplios de agua, y se fortalecerán?" 5 Entonces, tomando valor,
él reedificó todas las secciones destruidas del muro, levantó torres sobre ellos, edificó otro muro
al otro lado de ese, fortificó el Millo en la Ciudad de David, e hizo gran cantidad de armas.
6 El
nombró capitanes de guerra sobre el pueblo, entonces los reunió delante de él en el lugar abierto
en la puerta del valle y habló estas palabras de ánimo para ellos: 7 "¡Sean fuertes¡ ¡Tomen valor!
No teman ni se aflijan por causa de rey de Ashur o toda la horda que él trae consigo. ¡Porque El
HaKadosh con nosotros es mayor que el que está con él –
8 él tiene poder humano, pero nosotros
tenemos a YAHWEH nuestro Elohim para salvarnos y para que pelee nuestras batallas!" El pueblo
tomó de corazón las palabras de Hizkiyah rey de Yahudáh.
9 Después de esto, mientras Sanjeriv y su ejército estaban asediando a Lajish, él envió a
sus embajadores a Yerushalayim, al rey Hizkiyah rey de Yahudáh y a todo Yahudáh que estaba
en Yerushalayim, con este mensaje: 10 "Esto es lo que Sanjeriv rey de Ashur dice: '¿Qué les da la
confianza que soportarán un asedio contra Yerushalayim? 11 ¿No los ha engañado Hizkiyah? ¿No
los está él condenando de muerte por hambruna y sed cuando él dice: "YAHWEH nuestro Elohim
nos librará de la mano del rey de Ashur"? 12 ¿No es éste el mismo Hizkiyah quien removió los
lugares altos y ordenó a Yahudáh y Yerushalayim adorar delante de un altar y quemar incienso
sólo sobre él? 13 ¿No se dan cuenta lo que yo y mis padres hemos hecho a los naciones de otros
países? ¿Fueron los dioses de estos países capaces de hacer alguna cosa para rescatar a sus países
de mi mano? 14 ¿Quién de todos los dioses de esas naciones que mis antepasados destruyeron
completamente fue capaz de rescatar a su pueblo de ellos? ¿Cómo entonces el Elohim de ustedes
los rescatará de mi mano? 15 No dejen que Hizkiyah los engañe o los seduzca de esta forma, no le
crean. Porque ningún dios de ninguna nación o reino nunca ha podido rescatar a su pueblo de mi
mano o de la mano de mis padres. Por lo tanto, su Elohim no los rescatará de mi mano'" 16 Sus
embajadores continuaron hablando contra YAHWEH Elohim; y contra su siervo Hizkiyah. 17 El
también escribió una carta insultando a YAHWEH el Elohim de Yisra'el y hablando contra El,
decía: "Así como los dioses de las naciones de los otros países no pudieron rescatar a sus pueblos
de mi mano, asimismo el Elohim de Hizkiyah no rescatará a su pueblo de mi mano." 18 Ellos
estaban gritando altamente en el idioma de los Yahudim al pueblo de Yerushalayim que estaba en
el muro para que lo asistieran en derrumbar el muro, para ellos capturar la ciudad. 19 Ellos
hablaron acerca del Elohim de Yerushalayim del mismo modo como hablaron contra los dioses
de los otros pueblos de la tierra, cuales son la obra de las manos de hombres.
20 A causa de esto,
Hizkiyah el rey y Yeshayah el profeta, el hijo de Amotz, oraron referente a estas cosas, y
clamaron al cielo. 21 Entonces YAHWEH mandó un malaj, y destruyó a todos los poderosos y
guerreros, al jefe y los capitanes en el campamento del rey de Ashur, así él tuvo que regresar
abochornado a su propio país. Cuando él entró en la casa de su dios, sus propios hijos, quienes
salieron de sus entrañas, lo mataron pasándolo por la espada allí. 22 De esta forma YAHWEH
rescató a Hizkiyah y a los que habitaban en Yerushalayim de la mano de Sanjeriv el rey de Ashur
y de la mano de todos sus enemigos, y les dio descanso todo alrededor.
23 Mucha gente trajo
regalos a YAHWEH en Yerushalayim y regalos a Hizkiyah rey de Yahudáh, y él fue exaltado a
los ojos de todas las naciones después de estas cosas.
24[88]
Alrededor de este tiempo, Hizkiyah se enfermó al punto de la muerte. Pero él oró a
YAHWEH, quien le escuchó, aun dándole una señal. 25 Sin embargo, Hizkiyah no respondió
conmensuradamente con el beneficio hecho a él, porque él se hizo orgulloso; así trajo ira sobre sí y como también sobre Yahudáh y Yerushalayim. 26 Pero Hizkiyah luego se humilló a sí por su
orgullo, ambos él y el pueblo que habitaba en Yerushalayim, así que la ira de YAHWEH no los
golpeó durante la vida de Hizkiyah. 27 Hizkiyah tenía vastas riquezas y gran gloria. El se
proporcionó para sí con almacenes para plata, oro, piedras preciosas, especias, escudos y todo
tipo de artículos valiosos; 28 también ciudades para la cosecha de grano, vino y aceite de oliva; y
cuadras para todo tipo de animal de cría y corrales para los rebaños. 29 El se proporcionó de
ciudades para sí y compró manadas y rebaños en abundancia, porque Elohim lo había vuelto
extremadamente rico. 30 Fue este mismo Hizkiyah el que bloqueó la salida superior de la Fuente
Gijón y cambió el curso del agua directo hacia la parte oeste de la Ciudad de David. Y Hizkiyah
prosperó en todo lo que hizo. 31 Sin embargo, en el asunto de embajadores del rey de Bavel, que
les envió a él para averiguar de la maravilla que había tomado lugar en La Tierra, Elo him lo dejó
por si solo, para probarlo, para que El supiera todo lo que había en su corazón. 32 Y el resto de las
actividades de Hizkiyah, toda su bondad, están escritas en la profecía de Yeshayah el profeta, el
hijo de Amotz,[Is 36:1-39:8 ]
y en los anales de los reyes de Yahudáh y Yisra'el.[2R 18:1-20:21] 33 Entonces
Hizkiyah durmió con sus padres, y ellos lo sepultaron en el lugar alto entre las sepulturas de los
hijos de David. Todo Yahudáh y los habitantes que habitaban en Yerushalayim le dieron honra y
gloria a su muerte, después de lo cual Menasheh su hijo tomó su lugar como rey.